
La educación ha ido evolucionando a lo largo del tiempo, es cierto que venimos de una época de estancamiento y que los grandes cambios se están produciendo en esta última década.
En España el modelo educativo estaba centrado en el conocimiento y en la memorización y ahora estamos en la transición de que el modelo se centre en el alumnado y se evalúen las competencias por encima de la capacidad de memorizar. Y digo transición, porque no se puede realizar en dos días; no es una tarea sencilla.
Entre las competencias básicas tenemos la competencia lingüística, la competencia matemática, la competencia de aprender a aprender, competencias sociales y cívicas, la competencia que implica el sentido de la iniciativa y el espíritu emprendedor, la competencia relacionada con la conciencia y expresiones culturales y la competencia digital.
La competencia digital es reciente, ya que antes carecíamos de estos medios y se puede decir que hemos estado más de 2.000 años sin ella y pese a que según el Ministerio de Educación engloba los siguientes apartados, como vemos en la siguiente imagen, se puede decir que hay algo más.
Una de las competencias que realmente marca la diferencia en el desarrollo de una persona, condicionando mucho su propio desarrollo personal y laboral, es la competencia digital.
En la sociedad que vivimos estamos rodeados de nuevas tecnologías y el saber aprovecharlas nos puede ahorrar tiempo, desplazamientos, dinero y un largo etcétera.
Veamos ejemplos, para comunicarnos lo podemos hacer en persona, o con el uso de las nuevas tecnologías pudiendo hacer una comunicación en tiempo real, vía Smartphone, Skype o bien asíncrona, como sería con el correo electrónico o el WhatsApp. También pasa algo similar si hablamos de relacionarnos o expresarnos ya que disponemos de redes sociales, blogs y nuestro público destinatario puede ser mucho mayor. Sí pensamos en acciones cotidianas como realizar la compra, estar informados, reservar un viaje, leer un libro vemos que todo lo podemos hacer con medios digitales, de hecho, empieza a ser difícil encontrar situaciones dónde no podamos utilizar las nuevas tecnologías para realizarlas.
Por último, si pensamos en la productividad y la eficiencia, el saber utilizar las nuevas tecnologías y las aplicaciones informáticas otorgan ese plus o valor añadido a lo que hacemos: realizar un “buzoneo”, o una correspondencia masiva, es decir, enviar un correo personalizado a mucha gente, puede ser una tarea interminable, o puede ser una tarea de pocos minutos si sabemos utilizar el Word y el Excel.
De ahí la importancia de la competencia digital, porque dominarla nos va a facilitar y dar soporte al desarrollo del resto de competencias, y de igual modo que los teléfonos móviles han evolucionado a smartphones, nosotros tendremos que evolucionar a smartpeople, es decir, gente que sabe aprovechar toda la tecnología que tenemos a nuestro alrededor.
Jose Luis Terol
IT Coordinator