
Muchas veces te habrás preguntado qué es lo más importante en educación. Sin duda, la educación debe proporcionar a las personas las competencias necesarias para desenvolverse en la vida, es importante el rendimiento académico y obtener buenos resultados, pero no todo en educación se reduce a una calificación numérica, hay aspectos cualitativos que también son importantes en lo que llamamos educación, y sobre todo en la buena educación. Consiste en proporcionar no sólo conocimientos, sino también valores.
Al final, en la vida, de lo que se trata fundamentalmente es de ser personas, buenas personas que hacen que el mundo y la vida sean mejores y más agradables.
Por ejemplo, el valor del respeto es importante porque se trata del reconocimiento que tenemos por la dignidad propia del ser humano. El valor del respeto nos obliga a tratar con humanidad a nosotros mismos y a los demás, es una especie de cuidado que tenemos por nosotros mismos y por los demás para evitar perder nuestra dignidad y caer en la mala educación, en la inhumanidad y en la barbarie.
El respeto conlleva la reciprocidad en el trato que nos damos, el tacto en las relaciones, y también el dejar ser al otro en su autonomía y libertad.
Cuando faltamos al respeto, que debemos tener por nosotros mismos y por los demás, nuestra dignidad se daña, y con ella la convivencia, nuestra humanidad y libertad, nuestra vida se vuelve peor y sentimos que hemos traicionado nuestro mejor yo e ideal.
Este valor ha de ser trabajado desde pequeños, desde los colegios y también desde la propia familia.
Os dejo un ejemplo que puede ser aleccionador para todos. Diego Velázquez retrató en La rendición de Breda el respeto de los vencedores por los vencidos, enseñándonos el límite que impone el valor del respeto, pues pudiendo humillar al vencido se le rindió honores de invicto.
Héctor Solsona Quilis
Profesor de Filosofía